Nadie
Nadie es una película de acción con toques de comedia en la que un hombre convencido de que así evitará una escalada de violencia, decide no hacer nada cuando unos ladrones entran en su casa.
Hutch Mansell está casado con Rebecca con la que tiene dos hijos, Blake y Abby. Lleva una vida tranquila hasta que unos ladrones entran una noche en su casa y decide no actuar y dejar que se lleven lo que quieren. Los ladrones son un hombre y una mujer que no se llevan gran cosa, un poco de dinero, su reloj y poco más.
Aunque en esa ocasión su vida no sufre grandes cambios, solo los típicos comentarios de la gente que no entiende que no tratara de defender a su familia de los atacantes, pronto se verá envuelto en una escalada de violencia.
Y es que Hutch decide descargar su furia con unos hombres que suben al autobús en el que viaja él y que están montando jaleo y molestando a una chica.
Ahí vemos que Hutch es capaz de defenderse muy bien y es que en su pasado no era precisamente el hombre tranquilo que es ahora.
Tras dar una paliza a esos hombres que tratan de matarlo, uno de ellos muere y resulta que es el hermano de un peligroso hombre ruso llamado Yulian, un sociópata con buenos contactos, mucho dinero y recursos para complicar las cosas.
Además Yulian es el encargado de custodiar el Obshak, que es un plan de jubilación de la mafia rusa que consiste en un montón de millones en efectivo.
Yulian decide vengar a su hermano y va a por Hutch al que no le queda más remedio que comenzar una lucha por la supervivencia y contarle a su familia su pasado.
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