En plena hambruna postapocalíptica, un hotel ofrece un espectáculo con cena incluida al que es mejor no ir tal y como verás en la película noruega de terror, bueno más bien de suspense, titulada El cadáver.

En la película seguimos a una familia formada por Leonara, su marido Jacob y la pequeña Alice de diez años.

Cada vez es más duro sobrevivir debido a la escasez de comida, por eso Leonora decide comprar unas entradas para que los tres vayan al espectáculo de Mathias Vinterberg que se celebra en un hotel y que incluye cena.

Aunque Jacob lo ve todo muy raro y desconfía, al final esa noche van los tres al hotel donde tras devorar la comida que les ponen, Mathias Vinterberg anuncia el comienzo del espectáculo.

Todo el hotel es el escenario, tras una breve actuacción de los actores cada uno se va en una dirección distinta.
Y a partir de ahí, todos los que han ido de público tiene que llevar puesta una máscara, para diferenciarlos de los actores y actrices, y se pueden levantar para moverse libremente por el hotel siguiendo el camino del actor o actriz que más le ha llamado la atención para seguir la historia que está interpretando.

Lo de llevar la máscara a los protagonistas no les dura mucho porque al poco tiempo Alice desaparece y sus padres recorren el hotel buscándola.

A partir de ahí van sucediendo varias cosas hasta que descubren las verdaderas intenciones que tenía la invitación de esa noche.

La película está bien para pasar el rato pero me la esperaba diferente y no la considero para nada una película de terror más bien de suspense.

De su 1 hora y 26 minutos de duración me he pasado casi la mitad del tiempo esperando a que pase algo interesante, y cuando ya se desvela lo que pasa en el hotel, como es tan evidente lo que ocurre, pues no me ha sorprendido y todo ha sido muy predecible.

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