Pues ya tenemos una nueva serie de zombis en Netflix, esta vez la historia tiene lugar en Río de Janeiro donde aunque hay muchos disturbios en la ciudad, Brandão, el director y dueño de un reality llamado los dioses del Olimpo, se niega a cancelar la emisión de esa noche.
A los estudios donde se está emitiendo el reality llega un zombi y cada vez que muerde a alguien, a los pocos minutos se convierte en zombi por lo que cada vez hay más. Y no solo es ahí, está ocurriendo en muchas ciudades brasileñas.
Los concursantes del reality que quedan en el concurso como Madonna, Marcos, Augusto, T.K… están aislados en la sala donde viven por lo que no saben nada de lo que ha pasado, hasta que llega Nina, que trabaja en el programa, que ha conseguido sobrevivir a esa noche en los estudios y llegar hasta la sala. Como es normal no creen lo que les cuenta Nina hasta que lo ven.
Y después tenemos a Ana Schmidt y su hijo Léo. Ella es quien construyó la fortaleza del reality y la hizo autosostenible con placas solares y colector pluvial para recoger el agua de la lluvia, pero la despidieron. Los dos tratan de llegar hasta los estudios ya que consideran que es el lugar más seguro para refugiarse y además desde allí puede pedir ayuda vía satélite.
La serie tiene cosas absurdas como tener a un zombi encerrado en una habitación de la casa y lo único que te preocupa es que hace mucho ruido y no te deja dormir, en fin, tiene toques de humor.
Pero esto es solo parte de la trama, después vamos viendo como el problema no son los zombis si no que hay que temer más a algunos vivos, pero como esto ya ocurre más adelante, mejor lo descubrís al ver la serie.
La primera temporada de la serie tiene 10 episodios de unos 30 minutos cada uno, la tienes en Netflix y es apta para mayores de 16 años.