La película Hija de su padre, se ha estrenado hace muy poquito en Netflix, el 3 de agosto de 2018. Es una mezcla de comedia y drama, tiene una duración de 1 hora y 43 minutos y está recomendada para mayores de 13 años.
Rachel Hamilton (Kristen Bell) es una publicista adicta al trabajo a quien su prometido Owen deja plantada en el altar, ya que ella no es capaz de desconectar del trabajo ni el día de su boda.
Al día siguiente va a trabajar como si tal cosa pero no es tan fácil como ella esperaba. Tras pasar la noche bebiendo con su padre Harry (Kelsey Grammer), que se presentó a la boda sin avisar y con el que no tenía relación desde hacía 26 años, Rachel acaba de luna de miel en un crucero de diez días por el Caribe con su padre, solo con la ropa que llevan puesta.
Tras la sorpresa inicial, el crucero les vendrá bien para pasar un tiempo juntos, ponerse al día y ver si pueden tener una buena relación familiar.
La película se centra en las vacaciones en el crucero que hacen el padre y la hija y en su relación. Aunque eso depende del gusto de cada uno, para mi la película está entretenida, no se hace pesada ni aburrida y tiene momentos divertidos participando en las actividades y excursiones del crucero y otros más emotivos como cuando le cuenta por qué ha vuelto justo ahora. La película Hija de su padre la podéis ver en Netflix