Parásitos es una película coreana en la que seguimos a la familia Kim formada por cuatro personas: el padre se llama Ki-taek, la madre Chung-sook, el hijo Ki-woo y la hija Ki-jeong. Ambos hijos ya son mayores y viven en una casa situada en un semisótano.

La familia tiene problemas de dinero y actualmente no trabaja ninguno, bueno en realidad se ganan un poco de dinero montando cajas de pizzas, y los hijos no pueden estudiar por no poder pagarse los estudios universitarios.

Un amigo de Ki-woo está dando clases particulares de inglés a la hija de los Park que son una familia rica, pero como se tiene que ir un tiempo al extranjero para estudiar le propone a Ki-woo que sea él quien le de clases de inglés y así se ganará un dinero.

Con la recomendación de su amigo y falsificando los papeles universitarios consigue el trabajo en casa de los Park, que son un matrimonio con dos hijos y que vive en una gran casa con jardín.

A la familia Kim no le basta con que Ki-woo tenga trabajo y el mismo día de su llegada tras hablar con la señora Park, a Ki-woo se le ocurre un plan y poco a poco mediante mentiras consiguen todos los miembros de la familia Kim trabajar para la familia Park, ocultando su parentesco, y sin importarles que otros pierdan el trabajo para que ellos ocupen su lugar.

Cuando ya se han hecho con toda la casa y están disfrutando de su nueva vida, ocurren unos acontecimientos, de los que no os puedo decir nada, que ponen en peligro la buena vida que se han montado.

La película parásitos ha recibido varios premios entre otros 4 Premios Oscar o la Palma de Oro del festival de Cannes, pero a mi no me ha convencido para nada.

Se me hizo demasiado larga, dura 2 horas y 12 minutos, y aburrida por lo que no la volvería a ver. Aunque no todo es malo, el modo en el que se les tuerce la cosa a la familia Kim fue una sorpresa, me esperaba algún giro pero no de ese tipo, por lo que me sorprendió.

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